27 de agosto de 2012

Sobre el Tiempo y la valoración de existencia.





Parece que hay lectores a los que he cansado con mis intentos de reflejar la realidad política que percibo desde mi cristal opaco al que trato infructuosamente de transparentizar.  Será por eso que cuando pedí sugerencias sobre que tema abordar en mi próxima nota,  o sea esta, algunos pidieron algo que no sea ``política ´´.

Es entendible, o tal vez no, pero esta bueno de vez en cuando pretender que la Política no sea parte constitutiva y digamos fundamental de la realidad que nos afecta a diario y lo que es peor, de los planes que afectarán nuestras realidades próximas futuras.

Dicho esto y adoptando la actitud del hombre casado que se encuentra seduciendo a una veinteañéra una noche cualquiera mientras sabe que en su casa le espera la reprimenda de su mujer cuando llegue.

 Digamos, de momento que nos podemos olvidar y  decir me chupa un huevo, hablemos de otra cosa, pero  tal y como le pasará  al hombre infiel que se engaña  creyendo que en los besos de esa chica terminará felizmente su existencia, nosotros nos encontraremos teniendo que afrontar el tiempo de la vuelta a casa, de la realidad y entender que las cosas siguen pasando aunque uno no las quiera ver o pensar.

Hacer esto, aunque resulte placentero de forma momentánea no hace mas que alimentar ese arquetipo al que Jung define como La ``Sombra´´  y que se forma a partir de lo que vamos reprimiendo.

Por lo tanto y a pedido de ustedes hablaré de: el Tiempo.

Todos estamos de acuerdo en que si tuviésemos que nombrar entre todas las circunstancias , sensaciones , bienes , conceptos meta-físicos, entes tangibles e intangibles  que componen la experiencia humana cual es el mas valioso, éste sería el Tiempo.

Aun por encima del amor para los románticos  y también de Dios para los religiosos/osas.

Esto es tan así como los chirlos que le darán al señor cuando llegue a su casa.

 A quien opine distinto permítame decirle que esta equivocado y que, para  cada situación en la que usted plantee al tiempo como segundo en orden de importancia encontrará, con el Tiempo, que su preferencia era incorrecta.

Podemos analizar muchos ejemplos y propongo para quien no quede convencido que luego de leer esta nota se sienta en la libertad de plantear una situación X donde crea que el tiempo reviste una importancia secundaria para que quien se sienta con ganas, refute o adhiera  a su planteo. Anticipo, eso si, que será inútil y que solo servirá para perder el Tiempo.


Empecemos con un Clasico: El concepto de DIOS.

Digamos que podemos situarnos físicamente en la época en la que vivían los primeros seres humanos.  ¿alguien sabe hace cuanto Tiempo fue ?

Supongamos que podemos ver a través de una ventana que nos permite observar el paso de El Tiempo de lo que vemos mientras para nosotros el Tiempo se detiene o va mucho mas lento.

Veríamos pasar la vida de, por ejemplo algunas generaciones de humanos o proto-humanos que van experimentando como las relaciones interpersonales y familiares se van fortaleciendo.  Se generan los primeros lazos afectivos, aparecen los primeros sentimientos precedidos por supuesto por los instintos básicos, El cariño o el encariñamiento entra en acción solo para crear el caldo de cultivo para que florezca el amor.

Y de repente, se mueren .

Se muere un hijo o una compañera de ese humano primitivo.

La pena entra en acción. Como un fino anticipo de la tristeza.

A la par la curiosidad ha hecho lo suyo logrando que el hombre primitivo observe el amanecer y el atardecer.

Es demasiado pronto para hacerse la pregunta.

Vamos a la siguiente generación.

Instintos
Curiosidad
Instintos
Cariño
Amor ¿?
Felicidad
Pena
Tristeza.
Pregunta ¿?  Tal vez no .

Again, unas cuantas veces.

En algún momento muy atrás en la historia, el hombre primitivo sufrió lo que miles de años después Milan Kundera inmortalizo en una frase y en un libro.

La insoportable levedad del ser.

No somos nada dijo el borracho en el velorio.

Y el hombre primitivo se tomó quien sabe cuantos años más para escapar de ese sentimiento.

El atajo: Dios

Dioses tal vez. Algo. Lo que sea con tal de que no sea morir y listo.

Seria insoportable.

Tenia que haber algo más. Aunque sea un concepto, un pensamiento, algo que nos deje tranquilos.

Nació Dios.

Pero, como puede usted lector zagas advertir, para que naciera Dios tuvo que pasar el Tiempo.  

Lo curioso de este ejemplo es que sitúa a varias de las posibles opciones de mis lectores en un segundo o tercer orden después de El Tiempo .

Tal es el caso del Amor, y demás sentimientos.

Entendido esto y sin dejar de dar la oportunidad a ser refutado, podríamos situar a el Tiempo en los limites de la existencia.

Sabemos que el tiempo existió antes que los humanos. De hecho existió talvez antes que el universo, o no.  Por ahí eso no importa.

Y esta es la clave.

Siendo el tiempo lo más importante en la existencia humana, a veces no importa.

Paradoja.


Sin embargo y contradiciendo mis palabras encuentro en el ocaso de este razonamiento una puerta de escape.

Siendo el hombre el sujeto que  analiza el grado de importancia de el Tiempo, y siendo este análisis solo relevante a la existencia del mismo hombre, ya que carece de sentido para otro  ente que hará de seguro, otro tipo de análisis definiendo por supuesto otras importancias, encuentro en el mismo hombre y mujer claro esta, a un digno contendiente para nuestro querido ``el Tiempo´´

Se encuentra el hombre no solo en condiciones de rivalizar en importancia con el Tiempo sino que aun mejor, tiene serias chances de ganar.

Por cierto es el propio hombre quien cuenta con una maquina capaz de detener el tiempo y congelarlo por siempre, para, a voluntad, revivirlo una y mil veces.

La memoria.

Es de hecho la memoria quien termina por subyugar al tiempo poniéndolo a merced del capricho del hombre para cuando éste quiere recordar el pasado. Los besos de la muchacha, el abrazo de un hijo, la sonrisa de un hermano.

El hombre con su memoria parece estar aprendiendo como vengarse de El Tiempo.

``Es el Tiempo pues, con el paso del tiempo el esclavo del Hombre.´´



En fin… tengo que agradecer a quien propuso este tema que se llama Patricia, por hacerme pasar un buen momento conmigo mismo y en diferido con Ustedes.

Ojala que el Tiempo deje de ser importante. 

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