Si tratáramos de enumerar las razones por las que Ramirez no debía ser presidente del Pro San Juan tal vez necesitaríamos muchas mas hojas que las que tenemos ganas de leer.
Demasiadas palabras para describir un negocio tan pequeño y simple como vos Ramírez, parafraseando a los Redondos en Toxi Taxi.
Y es que, de seguro los jóvenes del Pro sintieron vergüenza ajena por las relaciones intimas que Ramírez mantenía con Jose Peluc.
Relaciones que adoptaban las mismas poses que las que mantiene Basualdo con Gioja.
Gioja ordena, Basualdo obedece, Peluc ordena, Ramírez obedece. Con besito en la nuca eso si, no hay que perder el romance.
Basta dijo el Pro.
La efímera intrusión de Ramírez en política solo demostró que no hay que descuidarse.
En un viaje a Baires cualquier gordito se trae una diputación abajo del brazo.
Lejos de marcar una diferencia con la falta de ética del gobierno, Ramírez se subió al mismo tren.
Imposible pedirle que renuncie al cargo de diputado que es del Pro y no de él, si nunca hizo los aportes al partido menos va a tener la decencia de irse a su casa y no molestar más.
El pro se libró de este gordito instigador y ponzoñoso pero los Sanjuaninos deberemos seguir pagando su sueldo como diputado por 3 años más. Que locura.
Como decía Chiche, echate Ramírez ¡¡ si tenes dignidad echate ¡¡
Ahora se abren nuevas oportunidades para que este partido muestre a la sociedad que no es lo mismo que producción y trabajo, que no son empleados de Gioja, que no toman a la gente de boluda.
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